viernes, 8 de diciembre de 2017

“El Vallejo de Granados”


Este año que concluye, luego de “Trilce: muletilla del canto y adorno del baile de jarana” (2007) o Trilce: húmeros para bailar (2014), ha sido particularmente fructífero en cuanto a publicaciones  alrededor de “El Vallejo de Granados” (frase acuñada por Amálio Pinheiro, desde una perspectiva de “transcriação y trasculturalidade”).  Los trabajos son los siguientes:
Trilce/ Teatro: guión, personajes y público (Aracaju, Brasil: Editora ABH, 2017). Série Hispanismo, v.5.  Prêmio Mario González.  Categoria: Literatura. 

“César Vallejo en español selvagem y portunhol trasatlántico”.  Sibila, 26 out 2017.

[http://sibila.com.br/critica/cesar-vallejo-en-espanol-selvagem-y-portunhol-trasatlantico/13205]

“Lomismo/Islismo: Poéticas gemelas de César Vallejo”.  Revista Laboratorio, No 16, 2017.

Poesía peruana post-Vallejo: de los indigenismos a las opacidades”.  Mitologías hoy, No 15, 2017.

Publicaciones a las cuales, en unos pocos días, y en exclusividad para este blog, se ha de sumar “Ayllu Orkopata vs. ayllu Trilce”; texto del que anticipamos la Sumilla:
En principio, este breve ensayo nace como una reseña al libro de Elizabeth Monasterios Pérez, La vanguardia plebeya del Titikaka.  Gamaliel Churata y otras beligerancias estéticas en los Andes (La Paz, Bolivia: IFEA/ Plural, 2015).  En específico, nos ocupamos de la polémica entre Gamaliel Churata (Grupo Orkopata) y la poesía de César Vallejo ventilada allí por Monasterios –la “Introducción”, el “Capítulo III” titulado “La diferencia vanguardista del Boletín Titikaka” y referencias o alusiones desperdigadas en varios otros pasajes de su libro–.  Debate bien documentado y formateado, el que establece Monasterios, aunque para nada simple o transparente; sino, por el contrario, demorado, complejo y sinuoso.  Lo cual, precisamente, nos llevó a pasar de la reseña a la elaboración de un texto algo más amplio.  En general, la autora intenta llevar de modo un tanto apresurado agua para su molino el cual, entre otros sugestivos argumentos, consiste en exponer las bondades –o, más bien, “beligerancias” descolonizadoras– e incluso preeminencia –a nivel regional– de la “poética” de Gamaliel Churata sobre la de César Vallejo o, de lo que hemos denominando aquí: Ayllu Orkopata vs. Ayllu Trilce.
Palabras clave: Gamaliel Churata y César Vallejo; Grupo Orkopata y Trilce; vanguardismos andinos.

jueves, 9 de noviembre de 2017

PROYECTO DE INVESTIGACIÓN de VASINFIN*


César Vallejo al (multi)natural: Biografía 

  Sumilla
 Investigar las diferentes etapas de la poesía y narrativa de César Vallejo; y también las biografías canónicas de este mismo autor (Juan Espejo Asturrizaga, Georgette de Vallejo, Stephen Hart, entre otras) bajo los parámetros de la perspectiva simétrica (Bruno Latour) o multinaturalista (Eduardo Viveiros de Castro) o, lo que el mismo César Vallejo denomina en sus crónicas de 1926, “fisiológica”: “La cuestión clave del arte y de la poesía nueva es fisiológica”[1]En otras palabras, intentaremos levantar --cual una serie de capas o niveles yuxtapuestos y simultáneos[2]: histórico, político, médico (narrativas, suyas o de otros estudiosos, sobre su enfermedad), cotidiano, mítico-- y editar en formato digital un nuevo tipo de biografía del autor peruano por ahora planteada sólo, en lo fundamental, desde una perspectiva historicista, positivista o unidimensional; lo cual, a su vez, sirva como precedente o modelo para otras biografías en la región.  Biografías multinaturalistas y polidimensionales, tanto de individuos como de colectivos sociales, vinculados fuertemente no solo a la historia o a los procesos sociales, sino también a la geografía o mitos inscritos en el paisaje (Chocano, Usandizaga y otros).   


[1] En las huellas del neurólogo Antonio Damasio, y tal como expone Anna Caballé: “la identidad reside en el cuerpo antes que en la mente […] es una cuestión biológica, antes que lingüística o cultural”.  A lo que cabría agregar, para matizarlo y darle una cobertura ontológica y no menos latinoamericana a nuestra lectura de César Vallejo: “es más verdad la geografía que la historia” (Caballé); en referencia a los mitos inscritos en los paisajes en los que hemos nacido, le haríamos decir nosotros.
[2] Una de las diferencias con Europa […] es que los incas pensaban que el pasado, el presente y el futuro eran paralelos (suceden al mismo tiempo) y no lineales […] Eso explica por qué sacaban a las momias en procesiones, al público. La gente que podía mediar entre las diferentes vidas era muy poderosa […] Si crees que el pasado, presente y futuro son paralelos, lo único que los une es un lugar físico. Una montaña, una piedra particular se convierte en el punto de conexión entre el pasado, presente y futuro.  Lo que para los europeos era una cima de una colina, para los incas podía ser un lugar sagrado, de gran importancia. La gente todavía no entiende esas percepciones del paisaje, la importancia de los lugares” (Cooper 2017).
*Abierto al apoyo o colaboración de otras instituciones e investigadores.